Arqueólogos británicos anunciaron el lunes que creen haber sacado a la luz en York (norte de Inglaterra) el cementerio de gladiadores mejor conservado del mundo.
Los expertos de la Fundación arqueológica York descubrieron durante unas excavaciones unos 80 esqueletos que datan del siglo I al IV de nuestra era.
Varias pistas permiten pensar a los científicos que se trata de antiguos gladiadores, los luchadores profesionales que se enfrentaban entre ellos o contra las fieras para divertir a los romanos.
La mayoría de los huesos pertenecen a hombres de constitución sólida y una estatura superior a la media. Muchos de ellos fueron decapitados.
Uno de los esqueletos llevaba señales de mordiscos.
"Una de las pistas más importantes es una gran marca de mordedura de carnívoro, probablemente infligida por un león, un tigre o un oso, una herida sufrida sin duda en el marco de un circo", estimó Kurt Hunter-Mann, quien dirige el equipo de arqueólogos.
Además, el estudio de varios esqueletos reveló que algunos hombres tenían un brazo más gordo que el otro, un caso frecuente entre los combatientes que manejan un arma pesada a menudodesde la adolescencia.
"De momento nuestra principal teoría es que numerosos esqueletos son de gladiadores romanos", explicó. "Pero las investigaciones continúan y debemos seguir abiertos a otras pistas", subrayó sin embargo.
"Son descubrimientos de una importancia internacional", se congratuló por su parte el doctor Michael Wysocki, investigador de la universidad de Lancashire que participó en la investigación. Según él, "no existe en ningún otro lugar del mundo un cementerio de gladiadores potencial con este nivel de preservación.
Los expertos de la Fundación arqueológica York descubrieron durante unas excavaciones unos 80 esqueletos que datan del siglo I al IV de nuestra era.
Varias pistas permiten pensar a los científicos que se trata de antiguos gladiadores, los luchadores profesionales que se enfrentaban entre ellos o contra las fieras para divertir a los romanos.
La mayoría de los huesos pertenecen a hombres de constitución sólida y una estatura superior a la media. Muchos de ellos fueron decapitados.
Uno de los esqueletos llevaba señales de mordiscos.
"Una de las pistas más importantes es una gran marca de mordedura de carnívoro, probablemente infligida por un león, un tigre o un oso, una herida sufrida sin duda en el marco de un circo", estimó Kurt Hunter-Mann, quien dirige el equipo de arqueólogos.
Además, el estudio de varios esqueletos reveló que algunos hombres tenían un brazo más gordo que el otro, un caso frecuente entre los combatientes que manejan un arma pesada a menudodesde la adolescencia.
"De momento nuestra principal teoría es que numerosos esqueletos son de gladiadores romanos", explicó. "Pero las investigaciones continúan y debemos seguir abiertos a otras pistas", subrayó sin embargo.
"Son descubrimientos de una importancia internacional", se congratuló por su parte el doctor Michael Wysocki, investigador de la universidad de Lancashire que participó en la investigación. Según él, "no existe en ningún otro lugar del mundo un cementerio de gladiadores potencial con este nivel de preservación.